PROTOCOLO DE BIENESTAR ANIMAL

Redacción de un protocolo de bienestar animal adaptado a la ganadería extensiva.

Según las normas de la UE sobre bienestar animal, los animales deben disfrutar de:

  • Ausencia de hambre y sed
  • Ausencia de molestias
  • Ausencia de dolor, heridas y enfermedades
  • Libertad de expresar un comportamiento normal
  • Ausencia de miedo y angustia

El bienestar animal es un requerimiento legal. La legislación sobre bienestar animal en la Unión Europea es amplia y minuciosa. La primera disposición se promulgó en 1974: Directiva 74/577/CEE del Consejo, relativa al aturdido de los animales antes de su sacrificio. La última reforma de la PAC, que regulará la actividad agrícola y ganadera en la Unión Europea entre 2023 y 2027 incluye fondos destinados a mejorar el bienestar animal y las condiciones de vida del ganado. Por su parte, la Estrategia ‘De la granja a la Mesa’ incluye también una propuesta de revisión de la legislación vigente en materia de bienestar animal, incluyendo el transporte y el sacrificio de animales (2023).

En España no existen consideraciones legales de carácter sectorial relativa a los pequeños rumiantes. Además, las técnicas para evaluar el bienestar animal han sido casi exclusivamente desarrolladas para sistemas de producción intensiva, mientras que los sistemas extensivos han sido casi ignorados (Turner y Dwyer 2007). Aunque la cría de animales en condiciones extensivas se puede considerar beneficiosa desde el punto de vista del bienestar animal, también se apunta que las condiciones naturales asociadas a la producción extensiva pueden crear una serie de problemas o retos de bienestar animal, como el estrés térmico, patologías no controladas, presencia de parásitos, malnutrición, variaciones en la administración del alimento dependiendo de la estación y de las condiciones climáticas, posible predación por parte de fauna salvaje, restricción de la posibilidad de seguimiento directo y supervisión, o falta de protección ante catástrofes naturales (Mathews, 1996; Petherick, 2005). En territorios con presencia persistente de carnívoros, el manejo de rebaños con perros de guardia es esencial, y su bienestar debe ser asegurado al igual que el de las ovejas y cabras que protege.